Espectáculos.- El asesinato de Carlos Manzo, alcalde de Uruapan, Michoacán, ha generado una ola de indignación no solo entre figuras políticas y ciudadanas, sino también entre influencers y creadores de contenido que lamentaron el crimen y cuestionaron la violencia que atraviesa el país.

Luisito Comunica: “Me dueles, México”
Uno de los primeros en pronunciarse fue Luisito Comunica, quien a través de sus historias de Instagram compartió su consternación por el asesinato de Manzo.
El creador escribió:
“En México, si intentas hacer las cosas bien… te matan.”
Además, confesó que evita hablar de temas políticos o de violencia porque, cada vez que lo hace, enfrenta campañas de desprestigio en su contra. Aun así, expresó su tristeza por lo ocurrido:
“Me dueles, México. Me dueles un chingo.”
Sus declaraciones rápidamente se viralizaron y provocaron una ola de apoyo de sus seguidores, quienes coincidieron en la frustración por la situación del país.

Yulay: “Nuestra única esperanza”
Otro de los influencers que reaccionaron fue Yulay (Julio César Fuentes), quien hace algunos meses había realizado un video-documental junto con Carlos Manzo sobre la violencia en Uruapan.
Tras conocer la noticia del asesinato, el creador publicó una historia en redes con la frase:
“Mis oraciones para este viejo, nuestra única esperanza.”
Su mensaje acompañó una imagen del alcalde y generó gran eco entre sus seguidores, quienes recordaron la entrevista donde ambos hablaron sobre los riesgos de denunciar la inseguridad.
Farid Dieck: “No podemos normalizar lo inaceptable”
Por su parte, el conferencista y creador Farid Dieck utilizó su cuenta de X (antes Twitter) para expresar su indignación:
“No podemos seguir así. No podemos normalizar lo inaceptable.”
El influencer señaló que el asesinato de Manzo es reflejo de una crisis de violencia que afecta a muchas regiones del país, y pidió no permanecer indiferentes ante la situación.
Las reacciones de estas figuras con millones de seguidores evidencian el impacto del caso en el ámbito digital, donde cada mensaje se convirtió en una muestra de solidaridad y en un reclamo colectivo por un México más seguro.
