Ciudad de México.- Este lunes la presidenta de México Claudia Sheinbaum viajó a Canadá a la cumbre de líderes del G7.
El foro de las principales economías mundiales representa una oportunidad para el encuentro de la presidenta Sheinbaum con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump en un terreno neutral donde se podrán abordar varios temas.

Los dos puntos económicos más importantes para México son las remesas y los aranceles, todo esto en medio de las protestas masivas que se llevaron a cabo el fin de semana pasado en varias ciudades del país Norteamericano.
Trump ha reconocido que la ausencia de obreros en el campo, la hostelería y el ocio han impactado en la economía nacional, esto como resultado de sus políticas antiinmigrantes.

La reunión también servirá al encuentro trilateral para asuntos del tratado de Libre Comercio (TMEC) que está por renegociarse.
La expectativa de la reunión entre ambos mandatarios es grande no solo por los temas entre ambas naciones, si no también por la personalidad de Trump, volátil, caprichoso, malhumorado o hasta gentil comparada con la presidenta mexicana, con su estrategia de “cabeza fría”, logra acuerdos que beneficien al país.
Con información de El País.